
En una revelación que ha sorprendido al mundo de la Fórmula 1, el equipo Red Bull Racing enfrenta un escándalo interno con la apertura de una investigación contra su jefe de equipo, Christian Horner, por acusaciones de comportamiento inapropiado. Este giro inesperado se produce en un momento crítico para el equipo, que se ha consolidado como una de las escuadras más dominantes en la historia reciente del deporte.
La noticia, difundida por el periódico De Telegraaf, señala que se están examinando alegaciones específicas contra Horner, quien es una figura clave en el éxito de Red Bull Racing en la Fórmula 1. El equipo, bajo su liderazgo, ha logrado un impresionante palmarés, incluyendo seis títulos de constructores y siete campeonatos de pilotos.
Oliver Mintzlaff, director del departamento deportivo de Red Bull, confirmó que se ha iniciado una investigación independiente para esclarecer los hechos. Un portavoz de la empresa también afirmó a De Telegraaf la seriedad con la que Red Bull está tomando estas acusaciones, asegurando que el proceso investigativo está siendo llevado a cabo por un abogado especialista externo.
El propio Christian Horner ha negado rotundamente las acusaciones, en un momento donde Red Bull Racing se prepara para celebrar su vigésima temporada en el deporte en 2024. Este escándalo emerge en vísperas de la presentación del equipo para la nueva temporada, generando incertidumbre sobre posibles cambios en la estructura del equipo debido a las investigaciones en curso.
El equipo, con sede en Milton Keynes, es un gigante en la Fórmula 1, no solo por sus logros en la pista, sino también como uno de los mayores empleadores en el deporte, con más de mil personas trabajando en sus diversas áreas. La noticia de la investigación contra Horner llega en un momento delicado, amenazando con empañar la reputación del equipo y posiblemente afectar su desempeño en un año que debería ser de celebración.