
El piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez se vio obligado a abandonar prematuramente el Gran Premio de Mónaco este domingo, después de un choque en la primera vuelta con Kevin Magnussen, del equipo Haas. Pérez expresó su frustración por el incidente, que también involucró a Nico Hülkenberg, compañero de equipo de Magnussen.
Durante una entrevista con Diego Mejía de Fox Sports, Pérez describió el incidente como «muy duro» y criticó la decisión de Magnussen de tomar un riesgo tan grande en una etapa tan temprana de la carrera. «El impacto fue muy duro, y aunque solo me golpeé un poco el codo, es muy frustrante terminar la carrera de esta manera, con tanto daño en el auto», explicó Pérez. Según él, no había espacio suficiente para que Magnussen intentara adelantar, lo que llevó a la colisión inevitable.
Por otro lado, Magnussen defendió su actuación, alegando que Pérez no había notado su posición y que, en consecuencia, cerró el espacio que él intentaba ocupar. «No salí de la nada, supongo que no me vio», dijo Magnussen durante una entrevista en la pausa causada por la bandera roja.
Lo que aumentó la controversia fue la rápida decisión de la Dirección de Carrera de no investigar el incidente. Pérez se mostró sorprendido y frustrado por esta decisión. «Es increíble que no hubiera investigación. Tomaron la decisión en tres minutos cuando fue un accidente tan fuerte. Creo que se tenía que haber investigado», comentó.
Este choque no solo marcó el retiro de dos pilotos, sino que también planteó preguntas sobre la seguridad y las decisiones de carrera en circuitos estrechos como Mónaco, donde adelantar siempre es un desafío. El incidente seguramente será tema de discusión en futuras carreras, mientras ambos pilotos y sus equipos evalúan las consecuencias de este tumultuoso evento.