
En el marco del Gran Premio de México, Christian Horner, jefe del equipo Red Bull Racing, dejó en claro que la situación de Sergio «Checo» Pérez en el equipo está bajo intensa observación. El piloto mexicano, que experimentó un fin de semana desastroso en la edición 2024 de su Gran Premio local, recibió una advertencia firme de parte de su director de equipo, quien reiteró la necesidad de obtener resultados consistentes en la Fórmula 1.
La jornada de Checo en México estuvo marcada por varios errores, incluyendo una penalización de cinco segundos por una mala colocación en la parrilla de salida y una pérdida considerable de carga aerodinámica —según él, «70 puntos»— tras un contacto con el piloto de Red Bull Junior, Liam Lawson. Estos incidentes le costaron al mexicano quedar fuera de la zona de puntos, lo que representa un golpe para el equipo en su lucha en el campeonato de constructores, donde Red Bull se encuentra en la tercera posición.
Horner, visiblemente frustrado, señaló que el tiempo comienza a agotarse para Pérez en un deporte que demanda resultados constantes. “Checo de nuevo ha tenido un fin de semana horrible y nada ha ido bien para él”, declaró Horner. “Él sabe que la Fórmula 1 es un negocio basado en los resultados e inevitablemente, cuando no estás cumpliendo, el centro de atención está firmemente en ti”, afirmó en rueda de prensa en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
El jefe de Red Bull dejó claro que el análisis del rendimiento de Pérez comienza de inmediato, subrayando que el equipo ha hecho todo lo posible para brindarle apoyo, pero que, si la situación no mejora, podrían tomarse medidas. Horner evitó confirmar si Pérez continuaría en el equipo hasta 2025, como había declarado previamente, y fue enfático en la necesidad de que ambos pilotos aporten puntos. “Llega un momento en que hay que tomar decisiones difíciles”, dijo, sin descartar la posibilidad de un cambio en el equipo si el rendimiento de Pérez no mejora en las próximas carreras.
Con cuatro carreras restantes en la temporada, Red Bull se encuentra en una posición incómoda en la clasificación de constructores. Horner dejó entrever la urgencia de mejorar para retomar la cima: “Nuestro objetivo es volver a una posición donde podamos ganar, pero será una tarea difícil en las próximas cuatro carreras”. La próxima oportunidad para Checo y Red Bull será en el Gran Premio de Brasil, donde las miradas estarán puestas en el desempeño del piloto mexicano, que necesita demostrar que puede contribuir a los objetivos del equipo.