
En una noche épica de fútbol, el Mallorca, dirigido por el estratega mexicano Javier Aguirre, se impuso ante la Real Sociedad, asegurando su lugar en la final de la Copa del Rey. El encuentro, marcado por momentos de alta tensión y destellos de magia futbolística, culminó en una victoria para el equipo de Aguirre, que ahora se sitúa a un paso de la gloria en uno de los torneos más prestigiosos de España.

La hazaña del Mallorca se cimentó en la segunda mitad del juego, con un gol decisivo de Giovanni Apud, y una actuación estelar del portero Dominik Greif, especialmente en la tanda de penales. El equipo resistió los continuos ataques de la Real Sociedad, manteniendo el marcador a su favor y demostrando una solidez defensiva que fue clave para su triunfo.
Javier Aguirre, conocido cariñosamente como ‘El Vasco’, ha sido pieza fundamental en este éxito, aplicando su experiencia y conocimiento táctico para llevar al Mallorca a competir por el título. Este logro marca la segunda vez que Aguirre disputará la final de la Copa del Rey, una hazaña notable considerando su anterior participación hace 19 años con el Osasuna de Pamplona, donde, pese a una valiente lucha, cayó ante el Real Betis.
El partido no solo fue un testimonio de la astucia táctica de Aguirre y la entrega de sus jugadores, sino también de momentos dramáticos como el penal detenido por Greif a Brais Méndez y el gol de empate de Mikel Oyarzabal que llevó el encuentro a tiempo extra. Sin embargo, el Mallorca, bajo la guía de Aguirre, demostró una tenacidad y confianza en los penales que finalmente les aseguró la victoria.
Aguirre y su equipo esperan ahora al ganador de la semifinal entre el Athletic Club de Bilbao y el Atlético de Madrid, con la esperanza de coronarse campeones. Este triunfo no solo representa una oportunidad de redención para Aguirre sino también la posibilidad de escribir un nuevo capítulo en la historia del Mallorca.

