En un emocionante encuentro amistoso que tuvo lugar en Filadelfia, la selección mexicana, dirigida por Jaime Lozano, se midió ante la potencia europea, Alemania, logrando un valioso empate 2-2 que augura buenos pronósticos para el Tricolor en su camino hacia la Copa América.
Desde el inicio, México dejó claro que no iba a ser un rival fácil para los teutones, a pesar de los cambios que atraviesa el equipo alemán. El partido se tornó intenso, mostrando un Tricolor con capacidad de reacción y una Alemania que, pese a estar en proceso de renovación, no deja de ser una amenaza en el terreno de juego.
La apertura del marcador estuvo a cargo del alemán Antonio Rüdiger a los 25 minutos, aprovechando una jugada a balón parado que evidenció ciertas carencias defensivas de México en esta modalidad. Sin embargo, Uriel Antuna logró igualar el marcador para los aztecas antes de finalizar la primera mitad.
El arranque del segundo tiempo fue prometedor para México con un gol de Erick Sánchez, quien, sorprendentemente, venció en el juego aéreo a Süle. Este gol recordó a muchos la actuación mexicana en el Mundial de Rusia 2018. A pesar de ello, Alemania no se quedó atrás y al 51′, Füllkrug marcó el gol del empate.
Más allá del resultado, el partido mostró intensidad y entrega por ambas selecciones, dejando atrás la etiqueta de «amistoso». Este desempeño resalta la promesa de la selección de Lozano, que con esfuerzo y trabajo, tiene el potencial de alcanzar grandes logros.
La próxima cita para el Tricolor será en la Fecha FIFA, donde se enfrentará a un rival aún por definir en los Cuartos de Final de la Liga de las Naciones. Esta serie a Ida y Vuelta determinará si México obtiene su pase a la Copa América 2024, marcando un desafío crucial en el inicio de este nuevo proceso bajo el mando de Jaime Lozano.