Lando Norris, piloto de McLaren, se impuso en la clasificación del Gran Premio de Singapur al lograr la pole position con un espectacular tiempo de 1m29s525. El británico dominó en el circuito de Marina Bay, superando a Max Verstappen, quien finalizó segundo con su Red Bull, y a los Mercedes de Lewis Hamilton y George Russell, que ocuparon el tercer y cuarto puesto respectivamente.
La sesión de clasificación no estuvo exenta de incidentes. La Q3 fue interrumpida a ocho minutos del final debido a un accidente del piloto de Ferrari, Carlos Sainz, en la última curva antes de completar su vuelta rápida. Solo Oscar Piastri, Nico Hulkenberg y Verstappen habían marcado tiempos antes de la bandera roja, aunque el registro del neerlandés fue eliminado por cruzar la meta bajo bandera amarilla.
Cuando la sesión se reanudó, los pilotos aguardaron hasta los últimos minutos para salir a pista. Norris aprovechó el momento y logró un tiempo inalcanzable, mientras Verstappen se quedó a dos décimas de su marca. Oscar Piastri, compañero de equipo de Norris, mejoró su tiempo, pero solo alcanzó el quinto lugar.
La clasificación también dejó momentos interesantes para otros pilotos. Franco Colapinto, de Williams, estuvo cerca de entrar en la Q3, clasificándose en la 12ª posición, a solo siete milésimas de su compañero Alex Albon, quien finalizó 11º. En tanto, Sergio «Checo» Pérez no pudo encontrar el ritmo adecuado y quedó eliminado en la Q2, finalizando 13º, tras una sesión complicada en la que no logró acercarse a los tiempos de los líderes.
Por otro lado, Fernando Alonso, quien largará desde la séptima posición, y Nico Hulkenberg, sexto con su Haas, también tuvieron actuaciones destacadas. Sin embargo, Charles Leclerc y Carlos Sainz tuvieron una jornada para el olvido. Ambos pilotos de Ferrari terminaron sin tiempos válidos en la Q3, y largarán desde las últimas posiciones del top 10.
El Gran Premio de Singapur promete una carrera emocionante este domingo, con Norris buscando su primera victoria desde la pole y Verstappen ansioso por remontar tras un complicado fin de semana.
