Tras 239 Grandes Premios, Nico Hulkenberg consiguió su primer podio en la Fórmula 1 al terminar tercero en el GP de Gran Bretaña, firmando una carrera impecable desde el fondo de la parrilla. La hazaña desató la euforia en el equipo Sauber, que celebró con música, champán y un trofeo LEGO en Silverstone.
Jonathan Wheatley, director del equipo, elogió el talento del alemán y afirmó con convicción: “Con el coche adecuado, puede ganar una carrera”. Este resultado no solo corona la perseverancia de Hulkenberg, sino también el resurgir de Sauber, que enlaza dos fines de semana exitosos tras años difíciles. El equipo ahora es sexto en el Mundial de Constructores y avanza firme en su transformación hacia la escudería oficial de Audi en 2026.