Max Verstappen culpó a los errores de Red Bull por su colisión con Lando Norris en el Gran Premio de Austria.
Verstappen, quien lideraba cómodamente, vio cómo su ventaja se desvanecía debido a unas paradas en boxes lentas, permitiendo que Norris se acercara y eventualmente chocaran en la vuelta 64.
Ambos pilotos sufrieron pinchazos, pero Norris tuvo que abandonar por los daños en su McLaren, mientras que Verstappen terminó quinto, penalizado con 10 segundos por causar el incidente.
«El primer stint fue bueno, pero después todo salió mal», afirmó Verstappen. «Las paradas en boxes fueron un desastre y nos costaron la carrera. El coche pasó de ser equilibrado a inconducible. Deberíamos haber ganado hoy si no hubiéramos cometido tantos errores».
El piloto de Red Bull enfatizó la necesidad de revisar y mejorar la estrategia y las operaciones en boxes para futuras carreras.